Anteriormente disponible sólo para unas 100.000 personas, Open AI quería ampliar y desarrollar su concepto dando acceso a su IA a más personas. Para poner en práctica este uso, el grupo ha establecido un sistema de créditos. Las personas que están en la cola reciben 50 créditos gratuitos por un mes de uso y cada mes reciben 15 nuevos créditos gratis. En el aspecto práctico, 1 crédito permite generar 4 imágenes simples y 3 imágenes si son necesarias modificaciones o creaciones. En función de las necesidades y el uso de cada persona, siempre es posible comprar créditos adicionales para explotar las imágenes generadas como se desee. Por ejemplo, se puede comprar un paquete adicional de 115 créditos por 15 dólares. Tras generar sus imágenes, los usuarios tienen plenos derechos y pueden utilizarlas como deseen, incluso para proyectos comerciales, "a partir de hoy las imágenes que crean con DALL-E, incluido el derecho de reimpresión, venta y comercialización". A la gran libertad que ofrece la IA se suma la generación de contenidos para garantizar que no circulen contenidos que atenten contra uno mismo, símbolos de odio o actividades ilegales. El objetivo principal de abrir DALL-E 2 a un público más amplio es ver cómo se utiliza esta tecnología en el mundo real en el día a día y hacer los cambios necesarios.